INTERNET se ha convertido en parte de nuestro día a día, en una herramienta que utilizamos no solo a nivel personal sino también en nuestro entorno profesional. Si nos paramos un momento a pensar en el uso que damos a la Red, la lista es larga: a través de internet hacemos compras, nos comunicamos, buscamos información, compartimos lo que nos gusta, vemos películas y programas de televisión, promocionamos nuestro negocio, realizamos transacciones bancarias, jugamos, trabajamos, aprendemos, divulgamos conocimientos... ¿Qué ocurriría si internet de pronto desapareciera? Nuestro mundo seguramente daría un giro de 360 grados.


Pensando en positivo, internet es, sobre todo, un lugar lleno de buenas personas con buenos propósitos, pero igual que en la vida real, también hay gente que utiliza la Red para propósitos no tan loables. Teniendo en cuenta la información personal que proporcionamos a la Red hay que actuar de forma responsable para mantener la seguridad. Pero se trata de una responsabilidad compartida, de una conversación que deben tener compañías, usuarios, padres, hijos, profesores, alumnos...


Convertir la Red en un lugar seguro no es posible sin un esfuerzo coordinado. Entre todos, necesitamos crear y fomentar una "cultura" de la seguridad y la responsabilidad en internet. Hay que velar por la privacidad, entendiendo por privacidad el derecho de cada persona a decidir qué quiere compartir y con quién quiere compartirlo. Pero es esencial que esa información que se comparte sea protegida, es decir, que sea segura. Las personas deben preocuparse por cuidar su privacidad y las compañías debemos proporcionar las herramientas adecuadas para que esa privacidad sea efectiva.


Son muchos los esfuerzos conjuntos que ya se están realizando en este sentido, desde instituciones gubernamentales, organismos líderes en seguridad, compañías tecnológicas e incluso ONG, colegios, universidades y organizaciones de usuarios. Un buen ejemplo es el Día de la Internet Segura, organizado por la Comisión Europea, que ha cumplido recientemente su décimo aniversario. Una iniciativa que involucra a compañías, organismos y usuarios en más de 90 países de todo el mundo, en la que se alerta sobre los peligros de la Red y se educa en el uso responsable de la misma. Otras organizaciones sin ánimo de lucro como el Family Online Safety Institute (Instituto de la seguridad online en la familia) se asoció en 2012 con Microsoft, Facebook y Google para desarrollar conjuntamente A Platform for Good (una plataforma para el bien), cuyo objetivo es proporcionar a adolescentes, padres y profesores las herramientas y el conocimiento que necesitan para utilizar Internet de forma segura.


En muchas ocasiones no protegemos bien nuestra propia privacidad, ya sea por desconocimiento, por pereza, por falta de tiempo... Pero seguro que a todos nos suena la frase "pinche aquí si acepta las condiciones de privacidad". Sin embargo ¿nos leemos bien esas condiciones antes de aceptarlas?


Desde el punto de vista técnico, las posibilidades de protección de la comunicación en internet son enormes. Existen programas de ordenador gratuitos y fáciles de usar, que permiten al usuario proteger su equipo de virus o ataques externos. Sin embargo debemos aprender a usar todas estas herramientas que tenemos a nuestro alcance para proteger nuestros equipos y nuestra información.


Esto es importante para todo el mundo pero en especial para los más jóvenes, pues su exposición a la Red es cada vez mayor. La educación sigue siendo una asignatura clave en el entorno on line y todos los que estamos relacionados de una u otra forma con la seguridad y la tecnología hemos de involucrarnos. Igual que de pequeños nos enseñaron las reglas básicas de protección en la vida real: cerrar la puerta de casa, mirar antes de cruzar la calle, no hablar con desconocidos, ser educados con las personas... ese es el comportamiento que hay que promover en la Red, y con el que tenemos que dar ejemplo.


Por tanto, las compañías, como PubliWeb, que operamos en internet tenemos que seguir trabajando y crear herramientas cada vez más avanzadas que protejan la privacidad y la seguridad del usuario, pero es importante que el propio usuario también actúe con responsabilidad. Muchas veces es solo cuestión de sentido común. Si no queremos que alguien vea una información, es mejor no subirla a la Red. Si alguien nos está acosando o detectamos un comportamiento negativo, denunciémoslo siempre. Protejamos nuestro ordenador con un buen software para evitar posibles virus o ataques y leámonos las condiciones de privacidad de cualquier página o servicio antes de decir "sí". La mejor forma de prevenir un fallo en la seguridad o en la privacidad es conocer los posibles riesgos y saber cómo afrontarlos. El esfuerzo de todos nos ayudará a seguir avanzando y mejorando herramientas para conseguirlo.

 



Monday, March 25, 2013

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